Tal vez creemos que es una semana más de vacaciones en el año, o que son simples feriados previos a la Pascua. Pero la verdad es que la Semana Santa es mucho más que todo eso.

Te contamos de que se trata para llegar bien preparados y entender un poco mejor todo lo que va a pasar en esta Pascua Joven.

¿Cuándo empieza?

La Semana Santa empieza el Domingo de Ramos, el domingo anterior al de Pascua. En este día recordamos la entrada de Jesús a Jerusalén, donde todos lo alaban como a un verdadero rey. El evangelio de la misa es la Pasión. ¡Te invitamos a que asistas a esta celebración en tu parroquia para que puedas ir preparándote para recibir a Jesús resucitado!

Jueves Santo

A partir del Jueves Santo comienzan los días más importantes de esta semana.

Ese jueves por la tarde comienza el Triduo Pascual: el primer día de tres para prepararnos bien a fondo. En la celebración actualizamos la Última Cena del Señor, donde Jesús instituyó la Eucaristía y el Sacerdocio. Él nos deja a nosotros su Cuerpo y su Sangre, para que en cada misa lo podamos recibir por entero.

Al terminar este último encuentro con sus apóstoles, sus amigos, Jesús se fue a orar al Huerto de los Olivos. Aquí lo solemos acomprañar con una Adoración al Santísimo, donde fijamos los ojos en Jesús sacramentado.

Viernes Santo

El viernes actualizamos la Pasión del Señor, junto al Vía Crucis (Camino de la Cruz). También, lo conmemoramos con la adoración de la Cruz. En Pascua Joven lo hacemos junto al obispo y un solemne silencio. En este día no se consagra la Eucaristía, por lo que se comulga con hostias y vino consagrados el día anterior, en la celebración de la Última Cena.

Sábado Santo

Un día de luto y silencio. Nos despertamos con Jesús muerto, pero a la noche celebramos la Vigilia Pascual, vivimos su paso de la Muerte a la Vida. La misa lleva varios momentos: el de la Palabra, donde leemos varias lecturas y cantos; el de la Luz, encedemos el Cirio Pascual como signo de esperanza y avance contra la oscuridad; el del Bautismo, con el agua como signo, donde renovamos las promesas bautismales; y el de la Eucaristía, donde recibimos a Jesús sacramentado y vivimos un momento de profunda alegría: Jesús resucitó para salvarnos. Es la celebración más importante para todos nosotros y una noche de fiesta en la Iglesia universal.

Domingo de Resurrección

La Pascua es el paso de la Muerte a la Vida. Ese domingo lo celebramos llenos de alegría, porque Jesús nos invita a vivir una vida transformados y nos abre las puertas al Cielo. Un día para pasarlo en familia o con los seres queridos, para compartir y festejar.